Hay figuras que cambian una cultura laboral, aunque no firmen contratos ni lideren reuniones. Los Mental Health Mentors no vienen a diagnosticar ni a dar terapia. Tampoco a sustituir el trabajo de los profesionales de la salud mental. Viene a algo igual de poderoso: estar presentes, escuchar, detectar, acompañar.
¿Quiénes son los Mental Health Mentors?
Son personas dentro de la organización que reciben formación específica para actuar como puntos de referencia emocional. No necesitan tener un cargo directivo, ni ser del área de RRHH. Lo importante es que sean personas con sensibilidad, compromiso y ganas de cuidar.
¿Qué hacen exactamente?
👉🏻Detectan señales tempranas de malestar en compañeros.
👉🏻Ofrecen una escucha activa y sin juicio.
👉🏻Saben derivar al PAE cuando es necesario.
👉🏻Fomentan conversaciones honestas sobre salud emocional.
👉🏻Ayudan a construir entornos laborales más humanos.
Un Mental Health Mentor no tiene que saberlo todo. No tiene que resolver los problemas de los demás. Pero si puede ser ese primer paso que abre la puerta al acompañamiento profesional. Y eso, en momentos de desgaste emocional, lo cambia todo.
¿Por qué funcionan? Porque están dentro. Porque no son una figura externa que aparece de forma puntual, sino que son parte del día a día. Conocen el ritmo, las tensiones, los silencios. Y eso les permite detectar lo que a veces pasa desapercibido.
Cuando en una organización hay Mental Health Mentors, el bienestar deja de ser un tema aislado para convertirse en una práctica cotidiana. Son faros dentro del equipo. Y muchas veces, gracias a ellos, una crisis se frena antes de explotar.
Contar con personas dentro de la empresa que puedan detectar el desgaste emocional a tiempo, con empatía y cercanía…
Es una estrategia de prevención tan simple como eficaz.